El @GobiernoDF le quita sus hijos a madre que retó a @EPN a dormir en un puente

Olimpia Lozada Martínez quien vivía debajo de un puente vehicular al oriente de la Ciudad desde hace cuatro años y retó a Enrique Peña Nieto a pasar una noche con ellos, demandó a las autoridades de la agencia 59 del Ministerio Público que le entreguen a dos de sus cuatro hijos, retenidos desde el 24 de abril en instalaciones de la Procuraduría capitalina (PGJDF).

El 13 de diciembre del año pasado, la madre denunció ante el Centro de Apoyo a Personas Extraviadas la desaparición de sus hijos, ocurrida dos días antes.

En abril, tras una denuncia anónima, elementos ministeriales hallaron a los niños en poder de Jorge Raúl Espinoza, quien los mantenía en un domicilio de Iztapalapa y ahora enfrenta cargos de abuso sexual y corrupción de menores.

Según la mujer, un funcionario de la Procuraduría le informó, sin darle argumentos, que no es apta para hacerse cargo de sus hijos.

Sólo se los entregarían a través de un familiar, algo que tampoco ha ocurrido.


Así, desde el 11 de diciembre de 2013, Olimpia Lozada Martínez sólo ha podido ver una vez a dos de sus cuatro hijos.

El encuentro de la madre con quienes son sus hijos mayores, de 11 y 10 años, ocurrió a bordo de una patrulla, tras la declaración de los niños en la Fiscalía Especializada en Delitos Sexuales, la madrugada del 25 de abril.

La mujer relata que su hija mayor se recargó en su brazo, mientras que el de 10 años no le soltó la mano durante el recorrido. Ambos lloraban... no se han vuelto a ver.

Luego de la desaparición, la madre levantó un acta en el Centro de Apoyo a Personas Extraviadas y Ausentes; sin embargo, la alerta Amber no procedió porque los niños salieron voluntariamente del puente vehicular donde viven con su madre y sus dos hermanos de 7 y 9 años.

Al salir del Centro, recibió una llamada de su hija:

"¿A dónde están?", le preguntó. "Con mi amiga Yamilé", respondió la niña. Era mentira. Al día siguiente, le volvió a llamar; quería saber dónde estaba, pero cuando la madre le dijo que los buscaba en el Centro de la Ciudad, se cortó la comunicación.

Con ayuda del DIF y el IASIS, la mujer buscó a sus hijos y repartió volantes en la calle.

Volvió a tener noticias el 8 de enero. La menor le dejó una carta con una conocida de Olimpia que vende periódico.

En ella decía que tenían miedo de volver. Había palabras sueltas al parecer sin sentido, como "tienda".

Olimpia ha reunido testimonios de padres y de profesores de la escuela donde estudian sus hijos, que respaldan la atención que ella les brinda.

Reforma