Al parecer el oficial detuvo al hombre para realizarle una inspección al considerar tener una actitud sospechosa, acto que no agradó al individuo ni a la gente que pasaba por la zona.
De esta manera el uniformado somete al joven contra una reja para revisarlo pero al pasar sus manos por sus bolsillos se encontró con 1,300 dólares.
Pero lejos de preguntar el origen del dinero o simplemente devolverlo, el robusto agente del orden consideró correcto confiscarlos para su propio beneficio.
Según relata el afectado, los 1,300 dólares los acababa de sacar del banco para utilizarlos con su mujer en los festejos del aniversario por su matrimonio.
El portavoz de la policía de Nueva York salió en defensa de su trabajador asegurando que el video no arroja las suficientes pruebas que demuestren el presunto robo.
Agencias
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