Israel había puesto en marcha una gran misión militar para buscar al soldado, que se creía había sido secuestrado. Unidades enteras peinaron y registraron en el sur de la franja de Gaza casas y sitios sospechosos, apoyados por fuego de artillería.
La mayoría de estos objetivos se encontraban en la sureña ciudad de Rafah y sus alrededores. Los israelíes sostenían que los militantes islamistas habían secuestrado allí a Goldin.
"Una comisión especial, dirigida por el rabino en jefe del ejército, anunció la muerte del oficial de infantería Hadar Goldin, caído en combate el viernes en la franja de Gaza", indica un comunicado militar.
El brazo armado de Hamas, las brigadas Al Qassam, negaron en la mañana de este sábado haber secuestrado al teniente. "No sabemos nada de un soldado desaparecido ni de su paradero ni de las circunstancias de su desaparición", se afirmaba en el comunicado enviado a la prensa.
En un posterior comunicado de la milicia islamista decía: "Hemos perdido contacto con los combatientes implicados y tememos que todos hayan muerto en el bombardeo" que luego llevó a cabo Israel. Se cree que también el soldado habría muerto.
El Ejército israelí indicó que la unidad a la que pertenecía Goldin trabajaba en la destrucción de un "túnel de terror", cuando fueron atacados por militantes palestinos. El paso subterráneo ingresaba dos kilómetros en territorio israelí.
Los combatientes palestinos salieron del túnel y atacaron a la tropa israelí, informó el diario Jerusalem Post. Uno de los palestinos detonó un chaleco explosivo, como el que usan los atacantes suicidas. Dos soldados israelíes perdieron la vida.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, había anunciado el viernes una dura reacción, mientras que Estados Unidos y el secretario de la ONU exigían la liberación sin condiciones del teniente.
Con información de La Jornada
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