Para realizar sus atracos, los criminales pinchan las llantas a los vehículos estacionados en las plazas o alrededores, sin que personal de vigilancia, taxistas, franeleros o policías estatales hagan algo para impedirlo.
Este lunes, un cliente de la Plaza Ánimas sufrió un intento de asalto afuera de las instalaciones. La persona, que prefirió omitir su nombre, relató a IMAGEN DEL GOLFO que descubrió su llanta ponchada cuando intentó abandonar el lugar. Fue al incorporarse a su vehículo y dar la reversa que escuchó el estruendo.
El hombre comentó que como medida de precaución se encerró en su coche y pidió auxilio a sus compañeros de trabajo. Cabe señalar que después de lo sucedido se descubrió en el lugar el artefacto usado para la pinchadura: una punta de metal sujeta a un par de cartoncillos, diseñado especialmente para desinflar neumáticos.
“Mis llantas no están gastadas, fue obvio que la pinchadura fue provocada, por eso opté por quedarme en mi vehículo y comunicarme con mis compañeros de trabajo. En ese momento no confiaba ni en la seguridad de la plaza”, dijo.
A su vehículo, que estaba estacionado frente a la entrada principal del centro comercial, se acercaron minutos después del incidente dos franeleros para “auxiliarlo”. Sin embargo, él se negó y les pidió que se marcharan.
Poco después, un hombre se ofreció para ayudarlo nuevamente, a lo que también se negó argumentando que ya acudían en su auxilio.
Después de algunos minutos llegaron sus compañeros en otro coche para trasladarlo a su lugar de trabajo y reportar los hechos.
Su vehículo se quedó en el estacionamiento de la plaza y tiempo después acudió personal de una empresa a recogerlo y observar lo sucedido.
Víctimas de delitos como éstos solicitaron a las autoridades y a la vigilancia del centro comercial tomar las medidas respectivas para evitar que corran riesgos la seguridad y los bienes de quienes asisten a estos establecimientos.
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