La empresa española se vio obligada a recortar sus precios un 50% por orden del gobierno venezolano.
El bajo precio de las prendas del grupo Inditex las convierten en un codiciado bien por parte de los venezolanos. Los venezolanos hacen cola durante horas en las puertas de las tiendas de Zara y Bershka para no quedarse sin los únicos artículos que pueden permitirse.
Las marcas del grupo se vieron obligadas a recortar sus precios un 50% por orden del gobierno venezolano. La llegada de que cada nueva remesa de prendas a las tiendas coincide con una avalancha de clientes que derivan en constantes faltas de stock.
Por este motivo, el grupo ha establecido una serie de requisitos para poder racionalizar las compras en sus establecimientos, según informa La República.
Los venezolanos deben presentar su documento de identidad para que se les asigne un número para poder entrar en las tiendas y adquirir un máximo de cinco prendas al mes.
También se establece que de estas cinco adquiridas, tres pueden ser superiores (camisas, jerseys, etc.) y dos inferiores (pantalones, faldas...).
Agencias
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